domingo, 24 de agosto de 2008

Auriverde el nuevo campeón



Abelardo Oviedo
Fotos: Cortesía de la FIVB

Inmediatamente de la clausura de los XXIX Juegos Olímpicos el pasado día 24, los analistas de los 204 comités olímpicos nacionales presentes en Beijing iniciaron su trabajo con vistas a la próxima fiesta deportiva cuatrienal que acogerá Londres, la capital del Gran Bretaña.
Una de las actuaciones que analizarán rápidamente será la de las voleibolistas brasileñas pues ganaron el cetro, además de liderar casi todos los clásicos importantes de la federación internacional del deporte.
El desempaño de las sudamericanas en el gimnasio de los trabajadores de la capital de China, los convirtió en una de las pocas naciones que ha logrado ese alcance con un solo parcial en contra tras los siete cotejos programados.
Las alumnas de Ze Roberto Guimaraes llegaron a la principal ciudad de China con un glamour similar al de 2004. En aquella campaña también dominaron el Grand Prix, pero luego el éxito les fue esquivo luego de caer en la semifinal ante Rusia; y más tarde ante Cuba en la disputa por la medalla d bronce.
Esta vez sucedió lo contrario. La señal enviada a los expertos fue más sólida. Sobresalieron en el último GP del ciclo con 13V-1D. Con ese resultado impusieron un límite para la competencia anual, porque también fueron titulares en las citas del 2005 y 2006. Asimismo, alcanzaron pizarras favorables en cinco de los seis cotejos efectuados contra equipos asiáticos, sus peores adversarios en el escenario internacional.
No obstante doblegar en la última fecha del GP por 3-0 sets a las estadounidenses, el estratega Ze Guimaraes mostró cautela en sus declaraciones a los reporteros. Tal vez recordaba el fracaso de sus discípulas en la capital helena y, por eso, soslayó aventurarse por la senda de los pronósticos: Siempre tenemos problemas cuando nos medimos con Estados Unidos, porque su plantilla la conforman varias atletas de alto nivel competitivo; y todas realizan buena defensa. No debemos olvidar que a ese adversario le faltó algunas jugadoras. Ello lo tendremos muy en cuenta para el futuro inmediato”.
En Barcelona 1992 él tuvo su primera coronación, pues dirigió al seleccionado de varones. Con el nuevo título olímpico en las manos el técnico adquirió otra connotación. Es uno de los pocos en el mundo con un doble de esa característica.
“Soy muy feliz y me siento grafiticado por el trabajo desarrollado en los últimos cuatro años. El juego frente a Estados Unidos fue diferente al celebrado con otros elencos en el torneo, porque su estrategia se basó en detener el empuje de Mari Steinbrecher; pero como imaginábamos que planearían esa estrategia, la preparamos para enfrentar esa situación. Ahora sí podemos decir que somos el mejor equipo del mundo”.
Con respecto a Barcelona y Beijing el brasileño apuntó: “En aquellos juegos Italia era el mejor de todos los competidores y el favorito para ganar la medalla de oro, pero el equipo brasileño jugó mejor cada día y obtuvo el mayor premio.
“Con el equipo de mujeres fue un trabajo distinto y difícil, luego de perder en Atenas. Pero analizamos críticamente el hecho y, en las últimas cuatro campañas, logramos un 90 por ciento de triunfos. Estoy agradecido por llegar a este momento y ganar el primer lugar, porque ese título se lo debíamos a nuestro país”.
Brasil es el voleibol…el voleibol es Brasil, apuntan los integrantes de la torcida que acompaña a los elencos auriverdes a todas las latitudes del planeta, porque sus coterráneas son las primeras latinoamericanas que dominan en la actual centuria el concierto de la relevante cita.
Sin dudas, enfurecieron con el quinto escaño alcanzado por las muchachas en el GP del 2007. Pero ahora fueron indemnizados por sus paisanas de manera convincente porque, además de convertirse en campeonas ellas igualaron el palmarés de las Espectaculares Morenas del Caribe en el 2000. Entonces, las caribeñas fueron las líderes del GP y luego conquistaron el máximo sitial olímpico.

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