martes, 20 de noviembre de 2007

Situación muy incómoda




Abelardo Oviedo, enviado especial
Fotoo Cortesia de la FIVB

Nagoya, Japón.-Lamentablemente, la selección cubana de voleibol, clasificación femenina, careció del empuje requerido para detener la estela triunfal de Italia aquí y cedió 0-3 sets (25-27, 19-25, 16-25) durante la décima jornada de la X Copa Mundial, evento que concluirá este viernes y, al mismo tiempo, se conocerán los tres elencos clasificados para los Juegos Olímpicos de Beijing, en el 2008.

Desde los primeros compases del encuentro sobresalió un ritmo de juego bastante acelerado y dotado de buenas demostraciones tácticas. Asimismo, la entrega por parte de las integrantes de las dos plantillas propiciaron aplaudidas demostraciones ofensivas y defensivas.

Con la pizarra desfavorable de 14-19 en el segundo parcial, el estratega cubano Antonio Perdomo envió a la cancha a Rosir Calderón en sustitución de Kenia Carcasés, quien había estado apagada por el bloqueo azurri. Pero como las alumnas de Massimo Barbolini protegieron bien su cancha, las caribeñas no pudieron voltear el marcador.

Un partido denominado como “el bueno… el que hay que ganar”, exige mucha concentración a las jugadoras involucradas. Inexplicablemente, la conducta de las nacionales descendió a niveles insospechados en el tercer parcial. Además de ejecutar saques deficientes, exhibieron reticencia para levantar las pelotas dejadas caer detrás del bloqueo, así como discutida capacidad para imponer una respetada barrera sobre la net.

Un torneo termina cuando finaliza el último partido calendarizado. Ni antes ni después. Ello subraya que en la fecha conclusiva podrían acontecer sucesos tal vez inesperados. El partido de despedida frente a Serbia no está considerado como “el bueno”, pero sí como el mejor, porque el éxito proporcionará –en última instancia– dejar una agradable silueta entre los aficionados japoneses.

Brasil de nuevo convincente

Todavía aquí se comenta la postura de José Guimaraes, el estratega de Brasil, al llevar a sus alumnas a la conferencia de prensa, luego de la derrota ante Italia. Algunos lo criticaron y sustentaron que era un descartado método pedagógico.
A mi modo de ver, fueron demasiado severos con el técnico que en el 2006 perdió en la discusión del título en el campeonato mundial, y cedió un año más tarde en igual tramo de los XV Juegos Deportivos Panamericanos y en el Grand Prix. Sus muchachas recorrieron sin obstáculos la trayectoria y después se derrumbaron.

Si alguien duda que esos antecedentes provocan retornar a senderos olvidados, censurados, descartados –como se les quiera llamar–, desconoce la responsabilidad que pesa sobre un hombre en momentos de esta naturaleza. Él, al igual que los otros cinco elencos con posibilidades de clasificación, necesitan lograr uno de los tres visados y, mientras no maltraten a sus discípulas, pueden utilizar el camino que les proporcione el éxito.

La vida, al parecer, le concedió la razón a Guimaraes; la escuadra auriverde que venció a Serbia 3-0 sets defirió sustancialmente de la que vimos en la jornada de apertura.

Tras los avatares, acudió a la conferencia de prensa. Sus críticos hicieron mutis. Con la decencia que lo caracteriza, enjuició el quehacer de las muchachas: “El juego de hoy fue muy importante. Nosotros conocemos bastante a Serbia y lo respetamos. Ayer traje a todas las jugadoras a esta conferencia de prensa, porque quería recordaran la responsabilidad que afrontamos.”

Su colega Zoran Terzic también fue muy sincero: “No me explico qué sucedió hoy. Quizás jugamos muy mal o Brasil muy bien, especialmente a la defensa. Nuestro ataque es suficiente, pero en esta jornada pocos cayeron dentro de los límites del terreno. Nosotros podemos jugar bien frente a los mejores equipos del mundo, como Brasil.”

La mirada atrás

Tras nueve jornadas completas, el libro del certamen cuatrienal indicaba que se habían celebrado 54 desafíos. Diez de ellos concluyeron en cinco sets, 13 finalizaron en cuatro parciales y 31 por 3-0 sets.
Por supuesto, en esta afamada ciudad empezaron nuevas historias de la disciplina. Kenya y Tailandia se midieron y el debate finalizó 3-2 favorable a las asiáticas. Así, estas alcanzaron su primer triunfo y las africanas lograron la sonrisa por primera vez en un set. Ambas escuadras ya figuran entre las que han logrado la victoria en el extremo límite. A esa altura de la cita, Italia desconocía las intimidades de ese túnel en el foro.

No hay comentarios: